¡Hola!
¿También sientes que terminas la semana como si te hubieran pasado por encima con una aplanadora emocional y física? Bueno, bienvenida al club… por eso mis viernes son sagrados. No porque salga de fiesta (aunque a veces se antoje), sino porque me los dedico a mí. Te comparto mi rutina de cuidado corporal que me ayuda a soltar, sanar y reconectar:
01. Dry brushing en seco
Con un cepillo de cerdas naturales hago masajes circulares suaves desde los pies hasta los hombros. Ayuda a eliminar células muertas, activar la circulación y relajarme antes de la ducha. ¡Literalmente barro el estrés!
02. Body scrub
Uso exfoliantes con sal o azúcar y aceites. Me gusta que se sienta la textura, pero sin lastimar. Lo aplico de abajo hacia arriba en movimientos circulares. Lo hago 2 veces por semana.
03. Jabón corporal & esponja suave
Ya no uso esponjas tradicionales. Ahora prefiero una ecológica, suave y duradera que hace espuma con poco producto. ¡Menos gasto, más mimo!
04. Pat drying
Nada de tallar la piel como si fuera piso de cocina. Me seco con suaves toques, cuidando la piel.
05. Body oil
Me encanta aplicarlo con la piel aún húmeda. Mi favorito: con lavanda o almendra. Siento que mi piel lo agradece al instante.
06. Loción corporal
La aplico encima del aceite para sellar la hidratación. Sí, ¡doble capa de amor!
07. Protección solar
Aunque no salga de casa, la aplico en cuello, brazos y escote. Cuidarse también es prevenir.
08. Body mist / perfume suave
Rocío un poco en mi cama y ropa. Es mi forma de sellar la sesión con una fragancia que me hace sentir tranquila.
¿Y tú tienes tu momento de cuidado?
Escribir, escuchar música o simplemente quedarme en silencio también forma parte de mi ritual. Todo suma para cuidarme mejor.
Porque sí, el cuerpo recuerda… pero también agradece.
Te leo: ¿qué haces tú para mimarte?
Déjalo en los comentarios o compártelo si conoces a alguien que necesita un día solo para sí.
Nos leemos el finde con más rituales de amor propio. ✨🤍
No hay comentarios:
Publicar un comentario